Las cervecerías son tendencia en todo el país.
Aunque parezca que no hay espacio para nuevos nombres, Bros&Hops abrió sus puertas en Honduras 5916, corazón de Palermo, para satisfacer a un público especializado en el tema.
Si bien hoy existen más de 1.000 lugares que ofrecen cerveza artesanal en Buenos Aires, son pocos los dirigidos para conocedores con opciones de calidad y a este público va dirigida la nueva propuesta.
“Nuestra mayor expectativa es que nuestros clientes vengan a Bros&Hops y disfruten a pleno la experiencia. Queremos que en el bar, se sientan como en su casa, antes de llegar a su casa. Y que cada vez que decidan venir, vamos a estar esperándolos con la mejor energía, siempre”, explica Juan Manuel Vilchez, uno de los dos hermanos socios.
Sin embargo, no son muchos los lugares donde disfrutar etiquetas como Cheverry, Beata, Strange, Minga, Waracha, Bierhaus, Gorilla o Grunge; e importadas como Schöfferhofer y Fuller´s.
“Investigamos mucho para poder brindar el mejor producto y servicio. Indagamos por ejemplo, por qué el mismo estilo de cerveza del mismo productor, pero ofrecido en diferentes bares, tenía distinto sabor y aroma. La respuesta está en la importancia del cuidado y la limpieza del sistema de expendio de cerveza. Es por eso que, otro gran diferencial, está aquí”.
La cervecería sigue el procedimiento de limpieza de la Brew Association de EE.UU. El objeto es lograr que la cerveza de sus proveedores mantenga el aroma y el sabor exacto. Además, tienen un proceso certificado para la limpieza de sus pintas (vasos), en 3 pasos utilizando 3 bachas diferentes. De esta manera se achica el margen de error de contaminación de la cerveza.
“Durante mucho tiempo se le ha permitido a los cervecerías y a los bares que ofrecen cervezas, ciertas licencias, errores o descuidos justificados por el simple hecho de ser artesanales, descuidando los estándares de los productores”, afirma Juan Manuel.
Este local cuenta con 300 mt2 divididos en dos plantas, la planta baja con un patio interno y 14 canillas, y una terraza calefaccionada al aire libre donde hay otra barra con 6 canillas de cerveza artesanal. Tiene capacidad para 250 personas y ofrecen hasta 120 cubiertos. En el diseño, priorizaron la comodidad: las mesas son grandes y sólidas, hay livings en la terraza y, estéticamente, es un ambiente coherente con la identidad gráfica que se trabajó para la marca.
Muchas de sus cervezas tienen medallas en diferentes concursos de cerveza artesanal, como ser South Beer Cup, Copa Argentina de Cervezas, Aro Rojo y copa Latinoamericana de Cervezas Artesanales. Los costos están adecuados a su calidad pudiendo obtener por $80 pesos la pinta en Happy
Hour y por $110 pesos en horario regular. Además, existe la oferta de una canilla de cervezas artesanales importadas donde el precio de la pinta es a partir de $170 pesos.
Otro rasgo característico es la calidez de su personal, su cercanía y buen trato “Todo está pensado desde la hermandad. Por eso nos llamamos BROS. Todo lo que suceda dentro del bar tiene que ser desde la buena onda, desde el buen trato, que se sientan cómodos. Que tengan libertades para sentirse en su casa”. De esta manera, entre calidad y calidez aseguran una experiencia única para elegir pasar “por casa” antes de llegar a casa.
